En la Región de Magallanes, la Fiscalía cuenta con una unidad clave para acompañar a quienes enfrentan procesos penales tras haber sido víctimas o testigos de delitos graves: la Unidad Regional de Atención a Víctimas y Testigos (URAVIT). Esta área especializada ofrece orientación, contención emocional y medidas de protección, con el fin de asegurar una participación segura y acompañada de las personas en la búsqueda de justicia.
La jefa regional de URAVIT, María Cecilia Valdebenito Delgado, explica que este equipo interdisciplinario está compuesto por siete profesionales especializados en diversas áreas. “Sabías que, junto con investigar y perseguir criminalmente los hechos constitutivos de delito en esta jurisdicción, cada fiscal y funcionario tiene por misión orientar, proteger y apoyar. Esa es nuestra labor en URAVIT”, afirma.
¿Qué hace URAVIT?
- Orientación jurídica: Las víctimas reciben información clara sobre sus derechos y el proceso judicial.
- Protección: Se implementan medidas para resguardar la integridad física y emocional de víctimas y testigos en riesgo, como alarmas personales, reforzamientos domiciliarios y reubicaciones temporales —incluso a nivel internacional.
- Apoyo psicológico y social: Se brinda acompañamiento emocional durante las etapas del proceso penal.
- Coordinación de ayudas: La unidad articula redes de apoyo con servicios de salud, seguridad y asistencia social.
Una parte central del trabajo de URAVIT es la atención especializada a niños, niñas y adolescentes víctimas de delitos, como el maltrato infantil y los delitos sexuales. “Mis labores fundamentales son realizar entrevistas investigativas videograbadas a NNA (niños, niñas y adolescentes), acompañarlos junto a sus familias durante todo el proceso, incluso hasta el juicio oral”, relata Valdebenito, quien además se desempeña como instructora de entrevistas en la región de Nueva Jersey.
Asimismo, URAVIT canaliza el Fondo de Aportes Económicos que permite a víctimas y testigos contar con recursos para enfrentar situaciones de emergencia derivadas del delito sufrido.
“Trabajamos con determinación para lograr una adecuada protección y apoyo para las víctimas y testigos. En la Fiscalía, cada acción está pensada para dar una respuesta humana, profesional y efectiva frente al dolor y la vulnerabilidad que significa haber sido víctima de un delito”, concluye Valdebenito.