El segundo semestre del 2025 llegará con una nueva alza en las cuentas de electricidad, que se sumará a los incrementos registrados en los últimos meses tras el fin del congelamiento de tarifas que se mantuvo vigente desde el estallido social y durante la pandemia. Esta vez, el aumento proyectado supera el 7%, lo que afectará a hogares de todo el país, siendo la Región de Magallanes una de las más golpeadas por este nuevo reajuste.
Uno de los factores que ha influido directamente en el alza es el aumento del precio del dólar, que impacta los costos de generación y distribución de energía, especialmente en zonas extremas donde el acceso a la red nacional es más limitado y los costos logísticos son mayores.
El seremi de Energía de Magallanes, Sergio Cuitiño, explicó que “en el caso de nuestra región nos vemos aún más afectados, ya que durante el invierno hay menos horas de luz natural, lo que incrementa la necesidad de consumo eléctrico para iluminación y calefacción”.
Frente a esta realidad, Cuitiño destacó que el Gobierno continúa trabajando en el proyecto de ley que amplía el subsidio eléctrico, con el fin de aliviar la carga económica de los hogares más vulnerables. “Esperamos que esta iniciativa avance pronto en el Congreso, para llegar con apoyo real a las familias más afectadas por estas alzas”, indicó.
En paralelo, desde la Seremi de Energía se reiteró el llamado a adoptar medidas de eficiencia energética en los hogares. Entre los principales consejos para reducir el consumo eléctrico se encuentran:
- Mejorar la aislación térmica de las viviendas para conservar el calor.
- Desenchufar artefactos eléctricos que no estén en uso.
- Preferir iluminación LED de bajo consumo.
- Optimizar el uso de calefactores y otros dispositivos eléctricos, especialmente en las horas punta.
La nueva alza refuerza la preocupación ciudadana por el sostenido encarecimiento del costo de vida, sobre todo en regiones como Magallanes, donde el uso intensivo de electricidad durante el invierno es una necesidad básica. Las autoridades locales insisten en que se requiere una respuesta estructural y subsidios efectivos que protejan a las familias frente a estos incrementos.