En el marco de una exhaustiva investigación judicial y policial, Carabineros de Punta Arenas logró la incautación de 10 vehículos adaptados para carreras clandestinas, conocidos como "tuning". Estos automóviles fueron confiscados bajo la figura del delito de carrera clandestina, lo que implica que su caso será derivado a la Fiscalía para un proceso de investigación penal, en lugar de ser gestionado por el Juzgado de Policía Local.

La operación se desarrolló tras una serie de denuncias ciudadanas sobre carreras ilegales que han generado preocupación en diversos sectores de la ciudad. La investigación, que demandó meses de trabajo silencioso, culminó con la incautación de los vehículos en distintos puntos de Punta Arenas.
Cristian Crisosto, fiscal regional afirmó: "estamos muy conformes del procedimientos, fruto de una labor inteligencial entre funcionarios de Carabineros, Fiscalía, Delegación presidencial; en pro de abordar las carreras clandestinas. Se hizo un trabajo mancomunado, con el aporte de todas las instituciones".
Para evitar que los conductores involucrados eludieran a las autoridades, Carabineros desplegó un operativo coordinado entre diversas unidades policiales. Los vehículos fueron trasladados y exhibidos en dependencias de la Subcomisaría Río Seco, donde permanecerán a la espera de la resolución judicial.
Las carreras clandestinas son tipificadas como delito en el Código Penal chileno, debido al alto riesgo que representan tanto para los involucrados como para los peatones y otros conductores. Este tipo de prácticas ilegales ha sido motivo de reiteradas denuncias por parte de la comunidad, especialmente en sectores donde suelen realizarse estas actividades, generando molestias y preocupación por la seguridad vial.